<< El que viva verá. Me viene la idea de que, en secreto, persigo la historia de mi miedo. O, más exactamente, la historia de su desenfreno, más precisamente aún, de su liberación. Sí, de veras, también el miedo puede ser liberado, y en ello se ve que forma parte de todo y de todos los oprimidos (....)
La mujer libre aprende a apartar sus miedos poco importantes y a no temer al único gran miedo importante, porque ya no es demasiado orgullosa para compartirlo con otras...>>

Casandra, Christa Woolf


"¿Quiénes sois vosotros para decretar quién debería seguir vuestras normas y leyes inventadas?" Layla Anwar, Mujeres en Iraq: nubes rosas y rojas



lunes, 29 de noviembre de 2010

madrid, aeropuerto de barajas...

Es curioso. Corremos por su culpa. LLegan tarde y tú tienes que correr para poder cambiar de avión a tiempo. También tenemos que comprar botes pequeños de todo porque no puedes llevar más de 100ml. (o algo así) en líquidos. "Tampoco de lentillas ahora" -me dice el segurata que agarra mi bote y amenaza con retirármelo del equipaje de mano- "Es que ya los venden pequeños, antes no, pero ahora sí..."
Esto después de que me cacheen. No llevo nada que "pite". Pero "pito". Y me cachean. Se lo digo a la mujer que me toca entre las tetas, los muslos, el culo (no puedo evitar acordarme de otras manos sobre mi cuerpo, mmmmmm, y deleitarme....) Sigo: se lo digo "imposible que pite. no llevo nada y sé que lo que llevo puesto no puede pitar. nunca pito." Me hacen quitarme los zapatos. Yo insisto. Ella me toca. Y me dice en voz baja: "Ya. De vez en cuando pita. Cada equis salta y tenemos que hacer esto..." La miro incrédula. Pero dura poco porque ya ando dándome la vuelta y poniéndome de espaldas a ella para que siga con su cacheo por la parte posterior de mi cuerpo... Mantengo mi mirada fija en la gente que espera para pasar por el detector de metales que conmigo pitó. Todo el mundo baja la vista, nadie me mantiene la mirada...
Mientras escribo esto esperando mi vuelo a Oviedo, que han retrasado por segunda vez, una mujer vestida de rojo a lo azafata, no hace más que gritar "Tenerife!!!" a toda persona que sale de la puerta por la que dentro de unos 20 minutos (confío) embarcaré. Cuando alguna asiente les dice: "Rápido. Corra(n)! Es la puerta siguiente!". Por fin, alguien: "No puede correr, tiene un esguince en la rodilla..." Y allá que se van despacio hacia la puerta de al lado... por mucho que lleguen tarde...
Yo vuelvo a recordar (por algo estoy escribiéndolo mientras la mujer vestida de rojo a lo azafata no hace más que gritar "Tenerife" y "I don't know" - al resto de pasajeros que apurados preguntan por sus destinos y salen corriendo por el aeropuerto...-) vuelvo a recordar, decía, que:

1.- llevo mi bote grande de lentillas en mi equipaje de mano
- "De esta marca no venden pequeños, y aunque lo vendieran no lo compraría, es demencial, es totalmente antiecológico, blablablabla. No me lo puede quitar, no me puedo ir sin él. Blablablablablabla"

2.- que me han entretenido un poco porque se me ocurrió decir:
- "¿Le importaría tocarme un poco más? Es que ya que lo hacen así tan al tuntún, pues al menos que me pueda dar un poco más de gustirrinín, no?"  Y luego sonreí...

Menos mal que mi vuelo parpadeaba intermitente en la pantalla:
"retrasado".... "delayed"...

;-p

2 comentarios:

Violeta dijo...

que vaya benne en Oviedo!

pensaba ir justo esta tarde a la librería! bueno, intento pasarme esta semana!

beeesos!

Pat dijo...

menos mal que te lees mi blog! ;) jajajajajaja! martes y miércoles estoy en la librería. el jueves y viernes vuelvo a viajar, esta vez a Vigo! :)

un besote guapa!